poesía en prosa sobre la ciudad,
la muerte, el sexo y la violencia.
De pronto, parecíamos muertos vivientes con las articulaciones rígidas, las extremidades torpes avanzaban desesperadas hacia algún lugar que mitigue la ansiedad y el dolor de la abstinencia y la carestía; la noche, suavizada con neblina de madrugada, dejaba ver siluetas de movimientos Riggor Mortis, a través de avenidas nocturnas alumbradas por luces de faros y neón, y algún auto que transitaba a esas horas. Aaahh!!!…cuando aprenderemos a tener control sobre las sustancias que ingerimos y en los actos que injerimos…
Recuerdo que el golpear del bajo de la Salsa las aturdió, la luz pegaba directo, estaban muy livianas, palpitantes, jugosas y olorosas, vestidos hasta las rodillas, escotes de pezones erectos, humo de entrepierna, de pelvis de ondulante movimiento, siento el calor de sus humores de labios mayores, clítoris sediento de fricción. Solo ahí me di cuenta de que ellas eran como unas dulces golondrinas que iban a descansar en mi mar salado; solo bastó decir: “polvo y ceniza”……
Que la palabra llegue, hasta donde ningún corazón roto pudo expresar sus dotes de la forma caníbal de amar entre Marte y Venus; exponiendo sus habilidades sexuales de llevar a un orgasmo de ficción, de internet, de mentira, pero tan real que nos haga gemir y eyacular sobre la alfombra negra de la sala elegante, sobre el cosmos eterno, salpicadura de estrellas, así es como empiezan las grandes plagas, sin control, brota su reproducción hasta autoaniquilarce o hasta que algún “Dios” exterminador lo haga.
Las locuras van y vienen, las locuras son y suenan, te pasas de listo acaso!!!!? …No, solo era espontáneo, justo cuando iba a nadar desnudo en el mar, surgió la gran ola de humanoides que golpeó la ensenada provocando un terremoto que se expandió hasta Júpiter rebotó en Ícaro, la luna y en tus entrañas, después de todo solo somos sangre, y vísceras con un ego elevado y autoestima por los suelos, cerebro encaminado y visión confusa, lo de la autoestima es subjetivo, todo es subjetivo…
131556479922465dfassdfdsgfh, números y letras inventadas…entre las cenizas revivimos como los muertos vivientes, que exclusivamente buscamos el más grande de los placeres, revivir la vieja rola, unos cargando el tórax del otro, íbamos sin rumbo fijo hacia nuestra casa ficticia: La Ciudad Impertinente….
La alegría de un bohemio, transformó el ambiente; un paraíso de cráter de volcán en el infierno, en plena erupción, las caras sudorosas y miradas morbosas de los y las asistentes, no se inmutaban a causa del gran tremor, siguieron bailando hasta que el piso se vino abajo, igual siguieron bailando, es ahí cuando la raza humana se reivindica, solo ahí es hermosa, cuando se apasiona, solo antes de morir…
Dos balazos después de que algún necesitado dijo: “bájate con la plata y el celular hijueputa!!!!”… dos balazos y silencio de madrugada... Ahora ya no parecíamos muertos vivientes, si no vivos murientes, y al final un solo de bajo con ritmo de Salsa apagaba el corazón, latiendo como un bombo de baterista cansado…“príncipe de los hábitos urbanos” sepultado bajo una ciudad que aúlla cada madrugada de fin de semana, aún no quiero morir…
M. PATRICIO YÉPEZ M.
